los meses y los dias
El proyecto aprieta,
y prometo (y rima)
que el lunes vamos a pasar un momento minicritico.
El proyecto,
en su proceso (y rima, mon Dieu)
es lento y la forma y el horario de trabajo tienden mas a la dispersion que a la concentracion.
Hace dos fines de semana estuve en Kep, al sur de nuevo, sobre el horizonte marino. Dos dias, sin pulir, silvestres, agua fria. El primer dia fuimos en un bote a una isla cerquita, rebosante de vegetacion, donde apenas cuarenta personas viven. Alli descubri uno de los sitios en los que uno esta obligado a no hacer nada (entre el purgatorio y el mismisimo cielo). El mar, un pequenio chambao donde comer las gambas pescadas. Las cabanias en las que dormimos tampoco permitian el artificio: leves prendas de hoja de palmera y bambu que transpiraban tanto como nuestra piel en el humedo y caluroso tropico.
Entre madera y agua volvimos a la costa, a una ciudad que antiguamente albergo en caserios modernos de verano a la clase alta del pais. Hoy trata de remontar el olvido en el que se sumio durante y tras la guerra. La belleza del olvido es dramatica, y puede que frivola. Pero eran hermosas las casas de verano invadidas por maleza, aun sostenidas por un hormigon armado expresivo y jovial.
Tras una semana en Pnohm Penh, volvi a irme con algunos alumnos de la facultad a Siem Reap, a ver los templos de Angkor, la anciana civilizacion de la que descienden los jemeres, actualmente camboyanos. Sirve ir a estos sitios para al menos tener un destello de humildad y reconocer que aunque la giralda es bella y el Quijote se escribio en Espania, habia otras cabezas bien puestas en otros paramos del mundo.
Y vuelta a la ciudad, y ayer fuimos a cenar a un Hotel porque el embajador espaniol en Tailandia vino de visita y queria conocer a la pequenia comunidad espaniola (unos veinte). Relajado al escuchar las palabras que si que entiendo, y acelerado al entender tantas palabras, nos pasamos la noche sabiendo que carajo hace cada uno aqui.
Y vuelta al trabajo y el tiempo que se aprieta como una venda sobre los ojos. Entre los meses que han pasado y los dias que me quedan hay un pequenio espacio con aire del cual ahora respiro. Pero me quedan tres semanas para -intensamente- bucear, asi que aspiremos el breve momento de ocio vacuo en el que ahora me encuentro.
1 Comments:
Hola Ale!!!! Qué alegría tener noticias tuyas.... Por lo que se ve en la foto parece que estás muy integrado. Ya nos contarás esas escapadas que haces a parajes tan fantásticos. Por aquí todo como siempre a destacar que por fin llueve en esta tierra tan seca que tanta falta hacía.
Cuídate....
17:09
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